Es un hongo perteneciente a la familia de los Agráciales, originario de Europa y América del Norte, que se cultiva de manera intensiva para su aprovechamiento culinario. Esta especie es la más utilizada en la gastronomía como hongo comestible.
Destaca por su bajo contenido calórico, ya que la mayor parte de su composición es agua. Asimismo, es una buena fuente de fibra, lo que ayuda a generar sensación de saciedad y contribuye a mejorar el tránsito intestinal. Además, ofrece una rica variedad de minerales como hierro, zinc, yodo, magnesio y selenio, junto con vitaminas del grupo B y vitamina E.